¿Eres Usuario Registrado? ¡Regístrate!
Es la prensa una de las creaciones culturales que mejor permite conocer el fundamento y el desarrollo de una comunidad histórica en la medida en que es el gran instrumento de conformación y de dirección de la opinión pública regional.
Zaragoza es una de las cunas de la imprenta en España, por lo que no es de extrañar que sean abundantes los precedentes de la prensa periódica y escrita, en forma de crónicas de sucesos (Breue epithoma apud Malacam Gestarum, 1487), de los clásicos avisos de los siglos XVI y XVII, como los conocidos de José Pellicer de Ossau (Zaragoza, 1602), de Gacetas como la Gaceta Nueva que se publica en Zaragoza en 1661, a la vez que aparece la Gaceta de Madrid, Noticias Generales, de Europa, de los sucesos de Cataluña, etc. Estos precedentes se consolidan en la primera mitad del siglo XVIII; desde 1733 aparece, con regularidad semanal la Gaceta de Zaragoza , con noticias de Europa, de la Corte de Madrid y algunas referidas a Aragón. Por estas fechas aparece en Madrid el famoso Diario de los Literatos de la mano, entre otras, del turolense Juan Martínez de Salafranca (1837) y el que ha sido considerado el primer diario español, el que hace el alcañizano Nipho en Madrid con el título de Diario Curioso-Erudito y Comercial, Público y Económico.
En 1797 aparece el Diario de Zaragoza , primer periódico diario aragonés y el de más larga duración hasta hoy, pues se mantiene hasta 1907, con algunos cambios de cabecera en relación con las coyunturas políticas: Diario de Zaragoza (1797). Diario Constitucional de Zaragoza (1820). Diario de Zaragoza (1823). Diario Constitucional de Zaragoza (1836). Diario de Avisos de Zaragoza (1844). Diario de Zaragoza (1846). El Zaragozano (1850). La Libertad (1854). Diario de Zaragoza (1856, hasta su desaparición en 1907).
En un principio, la novedad, además de la periodicidad diaria, consiste en abrirse más a lo informativo, a las noticias y anuncios; mientras que el Semanario de Zaragoza (1798) mantiene la línea de las revistas literarias y científicas del siglo XVIII.
Durante la guerra de la Independencia se siguen publicando la Gaceta y el Diario hasta que son suprimidos con la rendición, y durante la ocupación francesa se publica la Gaceta Nacional de Zaragoza, inspirada por la administración francesa. Tras 1814 se reanuda la publicación, dos o tres veces a la semana, de la Gaceta, y la del Diario, que después del alzamiento constitucionalista de Riego pasa a denominarse Diario Constitucional de Zaragoza (1820-1823).
Es tras la muerte de Fernando VII en 1833 cuando los cambios políticos y económicos se reflejan en la aparición de una prensa plural, extendida a las cabeceras provinciales y comarcales, múltiple y diversificada, con mayores contenidos de información, y también opinión. En primer lugar una real orden de 1833 establece en cada capital de provincia un Diario o Boletín Periódico para facilitar la circulación de las órdenes del gobierno «aliviando del peso de las veredas» a la Hacienda y a la Administración. El Boletín Oficial de la Provincia aparece en Huesca y en Teruel en 1835 y en Zaragoza en 1834. Se mantienen hasta hoy y en un principio tenían una función sustitutoria de la escasa prensa existente; suponen además una fuente de información histórica de primera magnitud.
Al lado del ahora Diario Constitucional de Zaragoza sale a la calle, en noviembre de 1838, El Eco de Aragón , su primer competidor, de tendencia claramente progresista, y obra casi personal de Braulio Foz . Con la efervescencia política de los años 1840-43 comienzan a aparecer órganos de prensa en otras capitales aragonesas: El Constitucional, El Centinela de Aragón en Teruel , La Atalaya en Barbastro , órgano de la Junta Superior de Gobierno del Alto Aragón, etc. Toda esta prensa desaparece con la reacción moderada de 1844, manteniéndose solamente los Boletines Oficiales de las tres provincias y el Diario de Zaragoza, que se ha de convertir en Diario de Avisos de Zaragoza y advertir que «no insertará ninguna noticia que trate de política». Durante la Década Moderada surgen periódicos en Huesca : El Protector de Aragón, interesante diario de intereses materiales, con fuerte contenido técnico y agrario, y una nueva línea de competidores del monopolio zaragozano y aragonés de El Diario que se concretará desde 1850 en El Avisador , propiedad del impresor Ramón León . Hasta 1854 ambos no presentan mayores diferencias y son principalmente diarios de avisos, bien alejados de la opinión política.
De nuevo el Bienio Progresista (1854-56) comporta la orientación política progresista de los dos diarios, que pasan a denominarse El Esparterista y La Libertad; mientras, con la misma orientación en Huesca se publican La Campana y El Eco de los Libres, dirigido por Francisco García López . Con la represión de la Ley Nocedal desaparecen algunos títulos, y los más estables, los zaragozanos —siempre con proyección regional— recuperan sus antiguas cabeceras y su condición de diarios de avisos «y de materias no políticas ni religiosas».
Con la liberalización de 1864 las novedades más importantes son la aparición de una segunda época de El Eco de Aragón con el mismo carácter original de defensor del progresismo, el nacimiento de la línea de periódicos de El Aragón (1863), El Imparcial (1864), El Correo de Aragón (1864), El Imparcial Aragonés (1865), y la consolidación de una prensa provincial y comarcal: las campañas de El Alto Aragón en Huesca, el asentamiento del diario El Turia en Teruel y la presencia en cabeceras comarcales de periódicos como El Pirineo Central de Jaca (1866), La Cruz de Sobrarbe y El Barbastrense en la ciudad del Vero (1860 y 1868), y de El Bajo Aragón en Alcañiz (1867), que inicia una larga y densa trayectoria de prensa alcañizana con fuerte contenido comarcal.
La ruptura del sistema moderado, la liberalización de las leyes de imprenta y la mayor democratización de la sociedad y de la política suponen un mayor número de publicaciones periódicas, representantes de diversas corrientes ideológicas, así como el alza de su difusión y de los índices de lectura. Es lo que sucede tras la revolución de 1868 y hasta 1874. El Diario de Zaragoza se inclinará por el conservadurismo y por la solución restauradora, El Eco de Aragón mantendrá posturas favorables a Prim y a Amadeo, situándose en el terreno monárquico. En septiembre de 1870, Calixto Ariño funda El Diario de Avisos , que, muy centrado en lo informativo, será un serio competidor del Diario y continuará su publicación hasta 1937. A ello se añade una intensa floración de periódicos republicanos en la capital aragonesa: La República (1872), El Estado Aragonés (1873), La Revolución, La Propaganda , El Republicano , La Tribuna, etc., todos ellos producidos sucesivamente por las diversas familias republicanas entre las que comienza a destacar en Aragón el grupo de los federalistas . El esquema se repite en Huesca y en Teruel, donde conviven órganos liberales y amadeístas como La Libertad (Teruel, 1871), católico-monárquicos (La Solución, 1870) y republicanos como la nueva etapa de El Centinela de Aragón; en Huesca, Rafael Montestruc dirige el republicano federal La Revolución , y el espectro queda cubierto con el conservadurismo de El Alto Aragón y el liberalismo amadeísta de El Progreso.
Tras la restauración monárquica de 1874 se da un control de la prensa que reduce el número de títulos y a la vez se configura una prensa diferente, de mayor envergadura empresarial, técnica, más profesionalizada, marginando a los pequeños órganos de partidos o grupos. Un ejemplo de ello es, en las décadas finales del siglo XIX, El Diario de Avisos, que llega a tirar 13.000 ejemplares e introduce desde 1898 los suplementos ilustrados. El Diario de Zaragoza es otra empresa sólida que a fines de siglo pertenece al político conservador Tomás Castellano y Villarroya y cierra su larga trayectoria en 1907. Tras la liberalización de 1881, La Alianza Aragonesa representa las posturas del Partido Liberal sagastino y otro diario de gran perfección técnica, La Derecha , recoge la línea de los republicanos posibilistas partidarios de Castelar.
Pero en el fin del siglo los acontecimientos de más trascendencia son la aparición del Heraldo de Aragón (1895) y el nacimiento en 1901 de El Noticiero . El Heraldo es fundado como periódico «liberal independiente» por Luis Montestruc y al año siguiente lo vende a Antonio Motos Martínez , que ha repatriado capital indiano desde su estancia en Filipinas. El Heraldo, desde sus primeros años busca y consigue un público amplio, cubre el ámbito regional, es pionero en modernizaciones técnicas (teléfono, rotativa en 1908, suplementos dominicales, doble edición hasta 1915 de mañana y de tarde) y alcanza tiradas de 35.000 ejemplares en 1920. Empresa familiar, cuida estrictamente la profesionalidad e incorpora a las mejores figuras del periodismo: Sixto Celorrio , José García Mercadal , colaboraciones de Cajal , Costa , Paraíso , Cavia , etc. José Valenzuela de la Rosa , director desde 1906, compra el Diario de Avisos en 1912, y el Heraldo se convierte en el primer periódico regional y, por su continuidad hasta hoy, es el decano de la prensa aragonesa.
El Noticiero, por su parte, nace como periódico católico y desde el principio se incorporan, como redactores o como colaboradores la plana mayor del potente catolicismo social aragonés: Inocencio Jiménez , Salvador Minguijón , Severino Aznar , Juan Moneva , Genaro Poza , que lo dirigió entre 1915 y 1918, etc. A la vez se consolida paralelamente la prensa provincial y en Huesca se publica desde 1875 el Diario de Huesca , que cubre medio siglo de historia de la prensa oscense, fundado y dirigido por Manuel Camo , y que hasta 1936 será la columna vertebral de la vida política y social de la provincia. Parecida función ejerce en Teruel el Diario de Teruel , fundado por Alfonso Torán en 1885 y que se edita hasta 1908.
Es la época asimismo de las grandes revistas culturales: La Miscelánea Turolense , editada en Madrid entre 1891 y 1901 por Gascón y Guimbao ; la Aragón , editada también en Madrid en 1878-80, y la del mismo título publicada en Zaragoza entre 1900 y 1905 que surge en torno a Eduardo Ibarra y aglutina a la intelectualidad aragonesa, de la Revista de Huesca que edita el mallorquín Llabrés, catedrático del Instituto oscense, en 1903-04.
Se diversifica abundantemente la prensa comarcal y cabe destacar por su duración e incidencia el semanario Tierra Baja en Alcañiz (1905-1928), el periódico republicano de Calatayud , La Justicia , que se publica, desde 1888, El Pirineo Aragonés , cuya publicación se remonta a 1882; El Cruzado Aragonés , presente en Barbastro desde 1903; el renacido Ribagorzano , que se funda en 1904 como órgano de la Liga de Contribuyentes del Ribagorza , etc.
El fermento regionalista, cristalizado culturalmente a fines de siglo, y políticamente por las posibilidades que presenta la ley de Mancomunidades de 1912, está presente en todos los medios de prensa, y además genera una prensa específicamente regionalista. Así, García Mercadal funda en 1910 el diario La Correspondencia de Aragón , al que le sucede desde 1912 el también diario La Crónica , que será dirigido desde 1916 por Giménez Soler y Domingo Miral , y hará fuerte competencia al Heraldo. Son las fechas (1919) en que Calvo Alfaro y Gaspar Torrente inspiran en Barcelona el quincenal aragonesista El Ebro .
Con el fin de siglo despierta también la prensa republicana de partido, en su línea radical lerrouxista (El Progreso , 1903, El Porvenir, 1906, La Correspondencia, 1910-17) o en la línea republicana federal, que llegará a conformar un Partido Republicano Autónomo Aragonés , del que será órgano el importante semanario El Ideal de Aragón . E incluso las organizaciones obreras, singularmente los grupos anarquistas y desde 1910 la CNT, ponen en pie una prensa propia que va desde las hojas sueltas de fin de siglo (El Rebelde 1893 y ss.) hasta consolidados semanarios en los años 20 del presente siglo como El Comunista , Voluntad o Cultura y Acción , que llegan a tirar entre 5 y 8.000 ejemplares.
En los años 20 aparecen importantes diarios como La Voz de Aragón (1925-1935) en Zaragoza, La Tierra (1921) en Huesca o La Provincia en Teruel, y en el terreno cultural el Aragón del S.I.P.A., cuya publicación ha llegado hasta hoy.
En los años de la República la prensa diaria se organiza en Zaragoza en torno al Heraldo, El Noticiero y La Voz de Aragón. A ellos se añade, al desaparecer La Voz, el Diario de Aragón (1935-36), dirigido por Amadeo Antón y que se presenta como el «único diario republicano de Zaragoza», y desde febrero del 36 la Hoja del Lunes . Sobre este panorama aflora la prensa de partidos republicanos: La República (1931) El Radical (lerrouxista, 1932), Resurgir (azañista, 1936) y los propios de las organizaciones obreras: Vida Nueva (1930-1936, órgano de la UGT y del PSOE zaragozanos, semanario), Adelante en Teruel (PSOE-UGT), Cultura y acción en Zaragoza (CNT), Vanguardia (Zaragoza 1935-1936, órgano de las Juventudes Socialistas y Comunistas en proceso de unificación), etc.
El 18 de julio de 1936 transforma radicalmente la situación y en Barbastro, Caspe, Fraga, etc., se han de improvisar unos medios de comunicación entre los que destaca el diario Nuevo Aragón , que el Consejo Regional de Defensa edita en Caspe durante la primera mitad de 1936. Mientras tanto, en el Aragón franquista se produce un proceso de adaptación que lleva consigo la desaparición de buen número de los órganos de prensa tradicionales (todos los republicanos, el Diario de Aragón singularmente), la acomodación de los menos (Heraldo) a la nueva ideología dominante, y el nacimiento, sobre todo desde 1937, de los nuevos diarios de FET y JONS: Lucha de Teruel, Nueva España de Huesca, Amanecer de Zaragoza.
El Heraldo de Aragón dominará el espacio de los medios de comunicación escrita en Aragón durante muchos años, al no estar marcado ni por las dependencias del Movimiento ni por la confesionalidad y militancia católica de El Noticiero. De hecho su director durante los años 40, Pascual Martín Triep , será destituido por la Dirección General de Prensa. El Noticiero deja de aparecer el mismo 15-VI-1977, con las primeras elecciones libres, y Amanecer acaba su andadura en 1979.
Esta estructura, apoyada también en los órganos del Movimiento en Huesca y en Teruel, perdura sólidamente durante cuarenta años. Hay que esperar a 1970 para que aparezca el vespertino Aragón/Exprés , al otoño de 1972 en que inicia sus pasos el semanario Andalán desde posiciones democráticas, regionalistas y claramente antifranquistas, sumándose a la presencia crítica del joven carlismo de Esfuerzo Común , para que se transforme mínimamente una estructura de prensa en Aragón que se mantuvo inmóvil durante 35 años. Desde esta nueva situación, lo más significativo puede ser la transformación de los tradicionales diarios Lucha de Teruel y Nueva España de Huesca, en su esfuerzo por acomodarse a las necesidades informativas de las respectivas provincias o los intentos colectivos de poner en pie un nuevo diario regional.
• La prensa aragonesa a finales del siglo XX: Durante los años ochenta y principios de los noventa una gran cantidad de medios de comunicación surgió en Aragón, sobre todo en lo que a la prensa escrita se refiere. Unos eran ediciones especiales de periódicos que triunfaban en otras comunidades, otros, fueron iniciativas propias de Aragón.
En enero de 1987 escribía su último número Andalán, que fue quincenal y semanario y se convirtió en un fuerte símbolo de la lucha por las libertades durante el proceso de transición política.
En la misma década también se liquidaron los últimos periódicos del régimen anterior transformándose en diarios de dos provincias aragonesas. En Teruel, Lucha pasaba en febrero de 1983 a denominarse Diario de Teruel , nombre con el que se le conoce hasta hoy en día. Mientras tanto, en Huesca, la Nueva España desaparecía para reconvertirse el 28-IX-1985 en el Diario del Altoaragón .
Los diarios comenzaron a salir también en lunes, acabando con una tradición de muchos años entre la prensa española.
Heraldo del Lunes apareció por primera vez el 8-X-1984. Esta edición especial del periódico decano de la prensa aragonesa diaria se mantendría hasta el 3-XI-1987. A partir de entonces, la edición del primer día de la semana sería completamente normal. Entre los periódicos que surgieron, Diario 16 de Aragón dio sus primeros pasos en mayo de 1989. Con una redacción joven en seguida consiguió una difusión importante, que lo situaba entre los rotativos de mayor tirada de la comunidad autónoma. Un año después, en octubre, después de una gran campaña publicitaria, salía a la calle el primer número de El Periódico de Aragón , perteneciente al grupo Zeta. El Periódico de Catalunya, su versión catalana había cosechado un gran éxito entre el público y pronto se convertiría en el principal periódico diario de la comunidad autónoma vecina.
Los que fueron naciendo a lo largo de los ochenta (Diario 16, El Periódico) también incorporaron nuevas tecnologías y el color en sus portadas desde sus primeros números.
Por aquellos momentos existía en Aragón una gran cantidad de periódicos diarios. Diario del Altoaragón, Diario de Teruel, Heraldo de Aragón, El Día , Diario 16 de Aragón, El Periódico de Aragón y el deportivo Stadio Sport, (además hay que tener en cuenta que ABC desde 1993 también realizaba una edición especial para Aragón) que había nacido el 22-IX-1990.
En una comunidad autónoma que se sitúa entre las menos lectoras de prensa diaria de España, se trataba de un elevado número de rotativos.
Para colmo, la crisis económica que se fraguaba por aquellos días, daría al traste con muchas experiencias comunicativas.
El primero en cerrar sus puertas fue El Día de Aragón, que mantenía dos ediciones provinciales en Huesca y Teruel. El 3 de noviembre de 1992 se publicaba el que llevaba por sobrenombre El Último Día, con una amarga despedida. Los últimos años del periódico fueron especialmente difíciles y polémicos. Con él desaparecía también el primer periódico económico de la comunidad, El Ebro Económico, nacido como suplemento de El Día, que con el tiempo adquirió una personalidad diferente.
Diario 16 de Aragón, por su parte, que atravesaba graves dificultades en toda España imprimió su último número en Aragón el 1.º de octubre de 1996. El 17 de diciembre de ese mismo año se aprobaba un expediente de regulación que ponía el punto final a un diario que tuvo una gran influencia en la política nacional. Los últimos días del rotativo fueron especialmente duros, con huelgas y enfrentamientos entre los trabajadores y la empresa editora.
Con estos dos cierres se consolida la supremacía de Heraldo de Aragón, con una difusión en continua ascendencia, que pasó de una media de 49.274 ejemplares en 1987 a 62.266 en 1996, según datos de OJD, a pesar de que en los años ochenta contaba con la competencia de otros cinco diarios en todo Aragón, en todos los años excepto en 1988 y 1990 se produjo una progresión de la difusión.
El Periódico de Aragón, que comenzó a tener control de OJD en 1992, muy pronto consiguió asentarse con gran predicamento y difusión en la sociedad aragonesa.
Por su parte, el único periódico propio de la provincia de Huesca, Diario del Altoaragón, también ha experimentado un importante ascenso. En 1987 su difusión era de 4.518 ejemplares y en 1996 fue de 6.665, hay que tener en cuenta que los potenciales lectores del Diario del Altoaragón son muchos menos que los de los otros dos diarios aragoneses, ya que éste se restringe a la provincia de Huesca.
Del resto de diarios no se tienen datos controlados por OJD, excepto de Diario 16 en 1989 que arrojó una difusión media de 4.897 ejemplares.
También hay que tener en cuenta el inicio de nuevas experiencias comunicativas. El 17-XII-1996, aparecía en Zaragoza el Diario de Bolsillo , un original periódico de reducidas proporciones. El que se hace llamar periódico más pequeño del mundo fue una idea de José Ángel García Longás, un periodista altoaragonés, que comprobó la eficacia de un diario de las mismas características en la ciudad de Albacete.
Esta década ha sido la de la revolución tecnológica aplicada a la prensa. La primera redacción completamente informatizada fue la de El Día, en 1982, que situaba a este diario en la vanguardia de los rotativos aragoneses. Heraldo de Aragón tardó unos años en adaptarse a los nuevos tiempos. En noviembre de 1988 nacía su nueva edición, con nuevo formato, una imprenta Koening-Bauer, modelo Express40 que alcanza una velocidad de 60.000 ejemplares por hora. Otra de las novedades del nuevo Heraldo fue la aplicación del color para las portadas.
En el verano de 1996 el decano de la prensa diaria aragonesa ponía en marcha una edición electrónica en Internet donde, además de reproducir la portada de cada día, se pueden discutir asuntos sobre Aragón. Se trata del primer rotativo aragonés que se puede consultar en la red.
Tanto Diario 16 como El Periódico de Aragón salían con las primeras páginas en color. Sólo El Día hasta su cierre y los diarios de Huesca y Teruel se mantienen entre la prensa diaria aragonesa únicamente en blanco y negro.
La prensa escrita va camino del siglo XXI conjugando diferentes servicios, cada vez más cerca del mundo multimedia.
Prensa comarcal. Una de las novedades más importantes entre la prensa comarcal ha sido la aparición, en 1987, del semanario La Comarca , de la Promotora Cultural del Bajo Aragón S. A. L. en el Bajo Aragón. En pocos años este periódico ha conseguido hacerse un hueco entre la prensa aragonesa. Otro semanal de las mismas características surgió en 1990 en Monzón , Ecos del Cinca, editado por el Ayuntamiento de Monzón. La Comarca de Calatayud, en 1991, que saca a la calle la empresa Com-Cal S.L. Más recientemente, en 1995, nació Crónica 15 días, y ahora mismo, el Grupo Z está participando en un ambicioso proyecto de periódicos comarcales.
• Bibliog.:
Fernández Clemente, Eloy y Forcadell, Carlos: Historia de la Prensa aragonesa; Zaragoza, 1979.
• Directores de prensa aragonesa de información general:
Amanecer: Maximiano García Venero, Ubaldo Pozas Vidal, Casimiro Romero Porta, Luis Climent Cirujano, José Fernández Aguirre, Maximino Sastre del Blanco, Dámaso Santos, Ulpiano Vigil-Escalera, Francisco Villalgordo Montalbán, Ignacio Catalán, Antonio Muñoz Mompeón, Francisco Villalgordo Montalbán, Ángel Bayod Monterde.
Andalán: Eloy Fernández Clemente , Pablo Larrañeta Goldáraz, Luis Granell Pérez.
Aragón 2.000: José Luis Aranguren Egozkue.
Aragón/Exprés: Eduardo Fuembuena Comín.
Lucha: Clemente Pamplona, Joaquín Foz, Clemente Pamplona, José María Gómez Cordobés, Francisco Montero Galvache, Manuel Guerricabeitia, Ricardo Acirón, Antonio Torrebadella, Manuel García Suárez, José Gonzálvez Suárez, Mariano Esteban Pueyo.
Esfuerzo Común: Ildefonso Sánchez Romeo, Antonio Torrebadella, José Omenat, Simón González y Gómez, José María Doñate Panadés, Tomás Muro López, M.ª del Camino Raquel Fernández Gago, Vicente Calvo Báguena.
Heraldo de Aragón: Luis Montestruc%9041, Antonio Motos , Darío Pérez , Francisco Aznar Navarro , José Valenzuela La Rosa , Filomeno Mayayo , Manuel Casanova, Pascual Martín Triep , José Morales López, Antonio Bruned Mompeón , Guillermo Fatás Cabeza , Miguel Iturbe.
Hoja del Lunes: Emilio Alfaro Lapuerta , Pablo Cistué de Castro, Simón González y Gómez, José Luis Aranguren Egozkue.
El Noticiero: Luis Mendizábal Martín , Manuel Cambón, Norberto Torcal, Inocencio Jiménez , Salvador Minguijón , José Álvarez Ude , Genaro Poza Ibáñez , Fernando Beltrán de Lis, Miguel Sancho Izquierdo , José María Sánchez Ventura , Antonio Álvarez Solís, Ramón Celma Bernal , Antonio Coll Gilabert.
Nueva España: Lorenzo Muro Arcas, José Julián García de Eulate y Luna, Juan Antonio Foncillas Cequier.
El Periódico de Aragón: Juancho Dumall Puértolas, Miguel Ángel Liso Tejada y Jaime Armengol .
• Presidentes de la Asociación de la Prensa de Huesca :
José Julián García de Eulate y Luna, Lorenzo Celada Ibáñez.
• Presidentes de la Asociación de la Prensa de Zaragoza (de Aragón desde 1991):
Luis Mendizábal Martín , Eduardo Ibarra Rodríguez , Alberto Casañal Shakery , Marcial Buj Luna , Félix Latre Lamarca, Julio Martín Pueyo, Antonio Mompeón Motos , José Valenzuela La Rosa , Fernando Castán Palomar , Victoriano Navarro, José Blasco Ijazo , Rafael Pastor Botija, José Morales López, Antonio Bruned Mompeón , Enrique González García-Mayorga, Manuel García de Frutos, Luis Granell, Ricardo Vázquez-Prada, Rosa Pellicero, Ramón Buetas, Camino Ibarz Gil.
Un paseo por la etapa de los logros democráticos, la convicción autonomista y el acceso al estado del bienestar en el Aragón actual.
Categorías y Subcategorías a las que pertenece la voz:
[ Alfonso I ] [ Calasanz Gastón, José de ] [ Sobrepuerto ] [ Juana Enríquez ] [ Califa ]
© DiCom Medios SL. C/ Hernán Cortés 37, 50005 Zaragoza
Inscrita en el Registro Mercantil de Zaragoza, en inscripción 1ª, Tomo 2563,
Seccion 8, Hoja Z-27296, Folio 130. CIF: B-50849983